Este tipo de hábito financiero se caracteriza por ser voluntario, puesto que cada persona determina la cantidad que desea ahorrar y el uso que le dará al mismo, lo cual también implica fijar un tiempo específico que puede ser a corto o largo plazo. Cabe destacar que el ahorro solo puede ser posible cuando los ingresos superan a los gastos. Así mismo, los ahorros pueden tener distintos objetivos como proteger el nivel de vida de las personas ante situaciones de pérdida o posibles reducciones de ingreso, así como para acceder a bienes que tienen un costo importante al ingreso personal o familiar, cuestiones de salud, educación y ocio.

En algunas culturas, el ahorro está destinado a la inversión y no al consumo, por ejemplo, en Japón existe una orientación arraigada al ahorro, mientras que, en culturas más capitalistas como Estados Unidos, existe la tendencia al consumo. Sin embargo, para mantener un equilibrio, lo ideal es tener una combinación entre el ahorro para inversiones o emergencias y ahorros para el consumo, lo cual beneficia al desarrollo económico y generación de empleo en los países.

5 tipos de ahorro y sus beneficios:

La acción del ahorro se realiza con base a las posibilidades de cada persona, su estilo de vida y funciona conforme a los objetivos planteados. Si estás en busca de iniciar un plan de ahorro y no sabes cuál elegir, te presentamos 5 tipos de ahorro y sus beneficios:

1. Ahorro de emergencia: Es un dinero destinado especialmente a casos de emergencia, por lo que debes considerarlo una prioridad. Este tipo de ahorro podría ayudarte en casos de enfermedad o un largo período de desempleo, y para que funcione la recomendación es que pueda cubrir por lo menos 6 meses de tus gastos y obligaciones financieras prioritarias.


2. Ahorro para un objetivo: Este tipo de ahorro puede estar destinado a comprar una casa, un automóvil, estudiar o irte de viaje. Lo recomendable para iniciar es que establezcas tu meta, analices costos, determines las fechas estipuladas para la compra y además fijes una cuota ya sea diaria, semanal o mensual, para el logro de ese objetivo.


3. Ahorro programado: Por lo general este es un tipo de producto financiero que ofrecen las entidades bancarias. Se caracteriza por ser un método que ayuda a crear el hábito de ahorrar ya que, se realiza un cobro semanal o mensual de una cierta cantidad de dinero de manera automática. Así mismo, este tipo de cuentas no permiten el retiro sino hasta el final del tiempo establecido, o en casos donde si se permita, el cuentahabiente tiene una sanción específica por el retiro anticipado.


4. Ahorro para los hijos: Este es un tipo de ahorro bastante común que las personas inician antes de tener un hijo, como un dinero necesario para su infancia o crecimiento. Otro objetivo de este ahorro es planificar para su educación universitaria, que por lo general es costosa.

Los expertos financieros recomiendan que el 50% de los ingresos se destinen a los gastos esenciales y básicos para vivir, el 30% para gastos personales o gustos y el 20% para ahorro. Es importante recalcar que no existe una clasificación exacta para los tipos de ahorro, pues se rigen por una serie de factores que responden a diversos beneficios, por ello antes de iniciar con cualquier plan de ahorro es indispensable plantearse las metas, elaborar un plan que responda a cuestiones de durabilidad, necesidades, objetivo y dinero requerido, además de elegir la opción ideal para guardar los ahorros y así lograr la meta deseada.